Cada día más el mundo se encuentra adaptándose a las tendencias ecológicas, y al manejo de los recursos sostenibles, que no comprometan el ambiente, ni los elementos que puedan incluirse en el mismo.

Es así, como el uso de los biopolímeros se ha tornado una necesidad para poder sustituir aquellas sustancias que pueden resultar nocivas y que pueden afectar la salud y la de los demás seres vivos que habitan en el ecosistema, pero ¿será cierto que su empleo resulta del todo adecuado? Si te interesa, no dejes de leer este post.

¿Qué son los biopolímeros?

Empecemos por lo primero, los biopolímeros son moléculas macro que proceden de materia natural o bien de fuentes renovables, que no se agotan con facilidad y que además pueden reutilizarse.

Sin embargo, el hecho de que sean biopolímeros, no involucra que los mismos puedan ser compostables o biodegradables, ya que conviene hacer dicha salvedad a que muchas personas consideran que contar con un producto de esta naturaleza, lo pueden reutilizar, pudiendo ocasionar así graves daños a la salud a razón de su inadecuada manipulación.

En todo caso, procederemos en las siguiente líneas a aclarar el asunto, para que en caso de necesitar para tu empresa el uso de dichos materiales, sepas escoger bien como proveedor a un fabricante biopolímeros compostables.

Biopolímeros Biodegradables

Conviene advertir que los biopolímeros biodegradables, pueden ser tanto biopolímeros como polímeros en sí, que de una forma u otra, son desgastados por la intervención de otro elemento que cuenta con microorganismos que afectan la esencia o integridad del biopolímero en sí, de modo tal, que este puede ser de procedencia sostenible o renovable, es decir, puede tratarse de azúcar, silicona natural o bien de petróleo.

Polímeros compostables

Por otra parte, los polímeros compostables son aquellos que terminan por degradar a la velocidad de su propia desintegración, es decir, en términos más sencillos, son aquellos que por su propia condición terminan por acabarse en su estructura, algo que también puede suceder a consecuencia de otro elemento que se agregue al componente.

Ahora bien, conviene aclarar que un compost, hace referencia a un proceso biológico e intrínseco de la propia materia, conforme a la cual, en su propia estructura esta cuenta con organismos, que con el paso del tiempo, terminan por desintegrarse.

Condiciones para que los biopolímeros se conviertan en compost

Es de igual forma, prudente advertir que los biopolímeros compostables, son biodegradables, y que estos pueden desintegrarse, siempre y cuando sucedan las siguientes condiciones:   

  • Mezcla con tamaños moderados, este es un factor preponderante mientras más grande o grueso, sea el componente a desintegrarse mayor será el tiempo que este dilatará en descomponerse, por lo que debe de contar con ciertas fragmentaciones en su estructura.
  • Para que los elementos biodegradables puedan ser compostables, es menester que exista cierto paso de aire, de esta forma, el oxígeno entra en contacto con la materia.

Es por ello, que puede apreciarse cómo en algunas zonas donde no llega el aire, las cosas permanecen a través del tiempo, sin sufrir mayor detrimentos en su composición.

  • Humedad, es necesario que exista cierto grado de humedad, algo que solamente puede lograrse con un poco de agua y de un nivel de temperatura adecuado.

Claro está, que estas son condiciones intrínsecas del ambiente, y que el espacio donde se ubiquen los biopolímeros pueden proporcionar, es por ello, que debe de permitirse el paso de la corriente de aire, y la generación de cierto líquido continúo sobre la preparación.

No puede excederse de agua, porque esta termina por ocasionar estancamiento e irrumpiendo en la propia materia, generando su impregnación y fermentación, que termina por convertirse en materia podrida, que puede generar malos olores y gases putrefactos.

En todo caso, si hay exceso de humedad, ésta siempre puede impedirse con la inclusión de materiales astringentes como pasto seco y cortezas de árbol en forma de aserrín que terminan por absorber el vapor de agua que exista en el ambiente.

  • Proporcionar una temperatura adecuada, lo ideal es que los materiales se ubiquen en un espacio, donde las temperaturas oscilan entre los 35 y 60 grados, que es capaz de proporcionar el vapor y mantener el agua en la atmósfera ideal para que los biopolímeros pueden compostarse.